FRATRICIDIO. Nueva novela de Cristihna Jarque.

FRATRICIDIO. Nueva novela de Cristina Jarque.
Próximamente se publicará en España (versión bilingüe, español-francés). Se presentará en Espacio Analítico en París en 2026.
Agradecimientos
Cristina Jarque

Pedro Jarque es mi compañero de vida desde hace más de tres décadas. No hay palabras que alcancen para dar cuenta de la hondura de nuestro lazo, porque justamente va más allá del lenguaje. Esta novela es también testimonio de ese vínculo: uno más de los hilos invisibles, profundos e indestructibles que nos unen, incluso frente a las fracturas que atraviesan la experiencia humana.

A mis hijos, Ana y Adrián Jarque, les debo más de lo que puedo nombrar. Gracias por su amor silencioso y constante, por su paciencia, y por sostenerme en los momentos donde escribir sobre la herida resultó tan arduo como necesario.
Agradezco profundamente la lectura y los comentarios de personas cuya mirada lúcida y generosa acompañó esta travesía:

Emmanouil Konstantopoulos (psicoanalista en Grecia).
Vannina Micheli-Rechtman (psicoanalista en París).
Adriana Varona (psicoanalista en París).
Ana María García (poeta en Perú).

Gracias al apoyo de Vannina Micheli-Rechtman, tenemos previsto presentar “Fratricidio” en el Espacio Analítico de París en 2026. Será un honor y un desafío compartir allí esta historia, nacida del deseo de pensar la violencia íntima, los secretos heredados y la posibilidad —si acaso la hay— de transformar el dolor en palabra. Junto a colegas y lectores, tendremos la oportunidad de reflexionar sobre cómo la escritura literaria puede convertirse en vehículo de transmisión del psicoanálisis, abriendo nuevas formas de escucha y comprensión de lo traumático.

Remerciements
Cristina Jarque

Pedro Jarque est mon compagnon de vie depuis plus de trois décennies. Aucun mot ne saurait exprimer la profondeur de notre lien, car il dépasse justement le langage. Ce roman est aussi le témoignage de ce lien : un fil invisible de plus, profond et indestructible, qui nous unit, même face aux fractures que traverse l’expérience humaine.
À mes enfants, Ana et Adrián Jarque, je dois plus que ce que les mots peuvent dire. Merci pour votre amour silencieux et constant, pour votre patience, et pour m’avoir soutenue dans les moments où écrire la blessure fut aussi ardu que nécessaire.
Je suis profondément reconnaissante à celles et ceux dont le regard lucide et généreux a accompagné cette traversée :

Emmanouil Konstantopoulos (psychanalyste en Grèce).
Vannina Micheli-Rechtman (psychanalyste à Paris).
Adriana Varona (psychanalyste à Paris).
Ana María García (poétesse au Pérou).

Grâce au soutien de Vannina Micheli-Rechtman, nous prévoyons de présenter Fratricide à l’Espace Analytique de Paris en 2026. Ce sera un honneur et un défi de partager là-bas cette histoire, née du désir de penser la violence intime, les secrets hérités et la possibilité — si tant est qu’elle existe — de transformer la douleur en parole. Aux côtés de collègues et de lecteurs, nous aurons l’occasion de réfléchir à la manière dont l’écriture littéraire peut devenir un vecteur de transmission de la psychanalyse, en ouvrant de nouvelles voies d’écoute et de compréhension du traumatisme. 

 


 


INFIEL. Serie sueca, dirigida por Tomas Alfredson (por Cristina Jarque).

 

INFIEL. Serie sueca dirigida por Tomas Alfredson
Cristina Jarque
Decidí ver esta serie porque está basada en una historia que vivió el mismo Bergman con Liv Ullman y que llevó a ella a dirigir la película que lleva el mismo nombre. La historia me ha parecido muy interesante porque nos permite alumbrar la pregunta eterna: ¿Qué quiere una mujer? Pregunta que se hizo Freud desde el principio y después, Lacan, en su retorno a Freud, dedicó gran parte de su enseñanza a tratar de dilucidar algo sobre el goce femenino. La historia de "Infiel" nos hace cuestionarnos qué es lo que lleva a una mujer, aparentemente feliz, casada con un hombre que la ama y madre de una niña, a entrar en una relación de infidelidad, comprometiendo su matrimonio y su estabilidad. Leyendo a Lacan me encontré con esta frase: "Decir que una mujer es no-toda... nos indica que ella es la única cuyo goce sobrepasa aquel que surge del coito. Es también por lo cual ella quiere ser reconocida como única". Esta frase nos hace ver que la posición femenina quiere algo: SER LA ÚNICA. La clínica psicoanalítica testimonia que varias analizantes tienen esa exigencia: ellas quieren ser las únicas. Eso significa que la mujer, en tanto no-toda, tiene una pulsión que la lleva a un exceso que se caracteriza por no tener límite y cruzar las líneas. El personaje de Marianne vive esta experiencia porque vemos que Markus, su marido, tiene otras pasiones, por ejemplo, la música y sobre todo la relación con Isabelle, la hija de ambos. Esas pasiones del marido colocan a Marianne en un lugar de soledad y de insatisfacción porque no se siente única para él. ¿Qué le ofrece David? Le ofrece esa sensación: la de sentirse única, y eso la lleva a la infidelidad. Marianne escribe lo siguiente: "Otro ser va creciendo en el interior de uno mismo, un monstruo. Resulta aterrador, inexorable. Pero es un proceso imparable, casi biológico". Es David quien está creciendo dentro de Marianne y Marianne se asusta porque es un goce que está más allá del coito. Ella siente que es única para David. Lo que experimenta este personaje, nos permite observar la posición de una mujer con relación al amor. Esta mujer tiene un goce que la impulsa a creer en el amor absoluto y por ello la empuja hacia lo insacible. Es una búsqueda insaciable del Otro. Lamentablemente, esta búsqueda suele ser mortífera ya que es imposible y suele terminar en la destrucción del sujeto. Esto es importante, puesto que plantea una exigencia en el amor que se empeña por ser todo para el Otro. La mujer siente una gran soledad en relación a su propio goce, ese goce femenino, ese goce que va más allá... Se siente sola e incomprendida... La soledad de la mujer se funda en un goce al que ningún hombre puede acceder, ni tampoco seguirla. Por eso me parece fundamental hablar de esta historia. Tengo que decir que acudí a la película para ver las diferencias, pues en la serie sueca el desarrollo del final es muy distinto. No obstante las diferencias (me gustó más la película) la serie nos permite desarrollar el vínculo del sujeto femenino con el amor absoluto y el goce que extrae de esto. Marianne encarna esa posición subjetiva, en la que el amor se vive como un acontecimiento absoluto, que desborda el deseo regulado por la norma. Su entrega a David, amigo íntimo de su esposo Markus, no responde a una falta racional, sino a un llamado desde un lugar donde el deseo ya no está en el campo de lo simbólico. Lacan distingue entre el goce fálico, que se inscribe en el orden del tener y la medida, y el goce femenino, que es un goce Otro, no-todo, fuera del lenguaje, fuera del cálculo. Marianne se abandona a este tipo de goce: desea ser deseada de forma única, irrepetible, como la mujer que ocupa un lugar insustituible para el Otro. Este goce no es placentero en sentido clásico; es exceso, es pérdida de sí. Su pasión por David implica destruir lo que la sostiene simbólicamente: su matrimonio, su rol de madre, su mundo. Pero ese amor absoluto tampoco se realiza; queda como marca, como resto no simbolizado. Lacan advierte que el goce del Otro es inaccesible: “el Otro no goza como yo”. Marianne persigue ese goce, pero se encuentra con su propia destrucción. El amor que la impulsa no puede inscribirse en un lazo estable: no está dentro de lo simbólico, es abismal. El sujeto femenino, al amar desde ese lugar, no busca reciprocidad, sino fusión con el Otro. Esa entrega la lleva a perder su lugar en el mundo simbólico. David, incapaz de sostener ese absoluto, también fracasa, dejando a Marianne vacía. Esta historia nos enseña que el goce femenino aparece como experiencia límite, no mediada por el lenguaje, que empuja al sujeto al borde de sí. No es un goce del tener, sino del ser, que, cuando no se simboliza, puede resultar devastador.
 

 

Cristina Jarque es Esmeralda de Víctor Hugo. En España, muy pronto...


 

Bajo la dirección de la Dra. Cristina Jarque, fundadora y presidenta de LaTE, se presentan tres conferencias enfocadas en el psicoanálisis.

 

LaTE. Es HOY (12/04) Recuerden que se ha cambiado el horario de verano en Europa con lo cual, ahora tenemos 8 horas de diferencia. Empieza 18H de España que son las 10H de CDMX.
Bajo la dirección de la Dra. Cristina Jarque, fundadora y presidenta de LaTE, se presentan tres conferencias enfocadas en el psicoanálisis.
1) José Ma. Bautista aborda el posicionamiento del psicoanálisis frente a los estragos de las prácticas psi, analizando cómo el enfoque psicoanalítico puede resistir y ofrecer alternativas frente a otras prácticas contemporáneas que pueden resultar invasivas o despersonalizadoras. Podemos plantear una pregunta ¿Cómo puede el psicoanálisis resistir a la tendencia de la medicalización del sufrimiento?
2) Adriana Varona presenta "El crimen: versión femenina", donde explora cómo se manifiesta el crimen en las mujeres, considerando las particularidades de la subjetividad femenina desde una perspectiva psicoanalítica. Podemos plantearnos una pregunta: ¿Qué papel juega el goce en el acto criminal perpretrado por sujetos femeninos?
3) José Antonio Orejel desarrolla "El circuito pulsional: claves freudianas y lacanianas", profundizando en la teoría de las pulsiones según Freud y Lacan, y sus implicaciones para la comprensión del deseo y la estructura subjetiva. Me viene a la cabeza una pregunta: ¿Cómo podría aplicarse la teoría del circuito pulsional en el trabajo clínico actual?
Estas conferencias ofrecen una mirada crítica y actualizada sobre temas fundamentales del psicoanálisis, abriendo espacio para el debate y la reflexión en torno a problemáticas actuales. Agradezco la oportunidad de formar parte de este espacio, donde el pensamiento psicoanalítico sigue interrogando al mundo y a nosotros mismos. Es un privilegio que estos encuentros, en su función de causa de deseo, posibiliten dar voz a nuestras preguntas y reflexiones sobre temas de actualidad. Nos vemos en unas horas.
 

 

LaTE-EnsoñArte-CoCrear. ES HOY (9/04). Clase "El yo y el a" del Seminario 14 "La lógica del fantasma". Interviene Yolanda Cogolludo, Más uno (+1) Cristina Jarque.

Esta clase es del 25 de enero de 1967. Lacan introduce una visión más compleja de la constitución del sujeto, el yo, y el objeto a, mostrando cómo estas nociones están relacionadas en una lógica de falta y deseo que es fundamental para comprender la estructura del inconsciente y el funcionamiento de la subjetividad. Lacan hace un enfoque clave sobre cómo el yo no manda en su propia casa ya que es un producto del Otro, es decir, de la imagen que el sujeto reconoce en el espejo. La imagen del yo es solo una imagen reflejada que promete la unidad y la totalidad, pero que, en realidad, es una ilusión que se mantiene sobre la falta y la fragmentación inherente al sujeto. Este yo, entonces, está marcado por la alienación y es siempre una construcción incompleta.  Lacan explora que la identificación con la imagen en el espejo es una identificación idealizada. Esta imagen produce una sensación de júbilo en el sujeto porque siente que corresponde a una totalidad, sin embargo no es así. La imagen especular es una construcción que busca ocultar la falta fundamental que subyace a la subjetividad. En esta reunión de estudios veremos que el fantasma es una construcción inconsciente que organiza la vida psíquica del sujeto en relación con la falta y el objeto a. Es a través del fantasma que el sujeto intenta lidiar con su deseo y con la falta inherente a su estructura. El fantasma permite que el sujeto mantenga una forma de "sujeción" a su deseo, estructurando su vida en torno a la búsqueda de ese objeto perdido. Por ello, el fantasma da sentido a las relaciones del sujeto con los demás, con los objetos de deseo, y con su propio cuerpo. De esta manera, el objeto a se convierte en el eje que orienta y organiza la vida psíquica del sujeto, aunque siempre permanece fuera de su alcance, lo que marca la experiencia humana con una permanente sensación de insatisfacción. El objeto a es cualquier cosa que el sujeto experimenta como deseada pero que nunca puede ser completamente satisfecha, y los ejemplos del pecho, las heces, la mirada y la voz son solo algunas de las formas que este objeto puede tomar. Estos objetos, más que ser cosas concretas, son construcciones simbólicas que surgen a partir de las experiencias de separación, frustración y deseo que configuran la vida psíquica del sujeto.